Te mataste.
Sabías que cuando entrás en esos juegos no podés salir.
O que te costaría demasiado.

Ahora, sos un desenfrenado,
y no sabés con quién estás jugando.

La madama de este juego es la peor que te podrías haber encontrado.

Y ahora está por matarte por completo.

Te dije que nunca juegues al amor con ella...

0 comentarios:

Publicar un comentario